Bodega Salto Chico, sus vinos, y las cervezas artesanales de Carlos Broglio

Visitamos la pequeña bodega que se destaca por la calidad de sus vinos tintos, degustamos algunos de sus ejemplares, y antes de dejar el establecimiento fuimos invitados a conocer Birra Point, el local donde se expende el llenado de growlers y se puede beber una pinta. Vino y cerveza, competencia o complementos en este mundo de las bebidas?

No es una bodega dedicada al enoturismo. Su entrada, muy discreta y con un pequeño cartelitito al costado de un camino de tierra entre la represa binacional y la ciudad de Salto, pasa casi que desapercibida para aquellos que no la están buscando o no usan una aplicación de Google maps con GPS para encontrarla.

Pero lo cierto es que allí, el Contador Carlos Broglio - con asesoramiento externo a nivel enológico - plantó el viñedo de 6 hectáreas donde cultiva cepas importadas de Europa, con las que elabora un puñado de etiquetas entre su rosado y los tintos, principalmente basados en la variedad Tannat, la misma que Pascual Harriague comenzó a cultivar a pocos kilometros de allí hace ya un siglo y medio.

Recorrido por el viñedo al caer la tarde, y buena charla de por medio, luego degustamos dos de sus vinos más emblemáticos, el Caburé 2017 y el Reserva Especial Tannat 2016, de los que les comentamos a continuación....

Salto Chico Caburé Blend 2017

Un jugoso corte que combina Cabernet Sauvignon, Tannat y Merlot, es un tinto de color rojo profundo con ribetes violáceos, aromas de frutas rojas bien maduras, algo de especias y toque leve de vainilla. En la boca se lo percibe de un buen volumen medio, entrada amable, repitiendo las notas frutales encontradas en nariz. Con una acidez final que le va muy bien. Ideal para acompañar pastas rellenas salseadas con una rica bolognesa y lascas de queso parmesano.

Salto Chico Reserva Especial Tannat 2016

Contundente tinto de color casi negro (la luz prácticamente no atraviesa la densidad de su color) en el que, en la primera olfacción aparece fruta negra madura, y una vez se airea con un giro de copa comienza a mostrar nuevas capas.... fruta roja en mermelada, algo de grafo de lápiz, tinta china, y muchas especias de la madera que lo cría durante largos meses. Ya en boca se muestra rotundo, casi se lo puede masticar. Taninos presentes y maduros, muy voluminoso y acidez final bien equilibrada. Un vino que ya se comienza a disfrutar, pero que sin dudas presenta un potencial de guarda muy importante. Para acompañar carnes rojas asadas a la parrilla, como por ejemplo un pulpón de vaquillona cocinado en su punto. Beber a no más de 16 grados.

Encantados de probar estos dos bellos vinos, y sorprendidos con su calidad, la sorpresa no terminó allí ante la interrogante de nuestro anfitrión cuando nos dice "¿sabían que estoy elaborando cervezas?.... lo que nos interesó, y así nos enteramos de que es un producto que Carlos viene elaborando desde hace ya unos años y que recientemente acaba de abrir, junto con un socio, un local cercano a la rambla costanera de Salto, con el nombre Birra Point, para expender esas mismas cervezas.

Invitados a conocer el local, por allí pasamos más tarde y disfrutamos de dos estupendas Ayuí (así la marca de las birras) en sus versiones IPA y Scottish, realmente refrescantes y que fueron como una bocanada de aire fresco en aquella cálida noche salteña. Una de las ventajas del local es que cuenta con canillas especiales, y los growlers se recargan con un sistema presurizado, que preserva la carbonatación y evitan la oxidación rápida del producto cargado. Toda una novedad!

Birra Point se encuentra localizada en la calle Atahualpa 696 (Ciudad de Salto)

Mayor información sobre bodega Salto Chico en www.saltochico.com.uy

Texto y videos: Sommelier Daniel Arraspide

Fotos: Andrea Fontes