Bodega Bouza con tres nuevas etiquetas de expresivos tintos
Fruta madura / Mermelada de frutas / Potencia compleja. Esos serían los tres títulos que le pondríamos a estos tres vinos - todos cosecha 2018 - (respectivamente y a saber: Merlot Viñedo Canelón Chico, Tannat del mismo viñedo, y Parcela Única Tannat B28) si los tuviera que resumir en tan solo dos o tres palabras. A quienes gustan de los tintos con carácter puro, estos tres seguro les impactarán!
Los vinos hablan por sí solos, y hablan más alto cuando por detrás de ellos hay una linda historia para contar. De otra forma (si no existiera esa historia) el vino sería una bebida más, hasta media insípida o masiva.... sobran ejemplos de ese tipo de bebidas que podríamos citar, pero no vamos a perder el tiempo haciéndolo.
Lo cierto es que los amigos de Bodega Bouza siguen creciendo en líneas de vinos, y por consiguiente en etiquetas. A sus viñedos ya conocidos de Melilla (mismo lugar donde se enclava la pequeña bodega boutique y el restaurante) y al de Las Violetas (en Canelones) se sumaron en la última década nuevos terruños.
Primero el viñedo en Pan de Azúcar (visible sobre la Ruta Interbalneária) y más recientemente el del Cerro Las Espinas (en donde planean construir la próxima bodega de elaboración, con un importante proyecto de enoturismo que ya está en andamiento) y últimamente el de Canelón Chico (también en el Departamento de Canelones) que fuera (en la totalidad de hectáreas) propiedad de las familias Améndola y Boido.
La sumatoria de los cinco establecimientos cultivados redunda en más de medio centenar de hectáreas, plantadas con las blancas Albariño, Semillón, Riesling y Chardonnay, a las que se agregan las tintas Pinot Noir, Tempranillo, Merlot, Cabernet Franc, y Tannat, totalizando nueve variedades.
Y así como los viñedos aumentan, también aumentan las propuestas en cuanto a los vinos que de la fruta allí obtenida se producen....
Bouza Viñedo Canelón Chico Merlot 2018 (Alc. 14,0 vol. / botella número 334 de 558)
Fruta madura es lo que exhibe este gran Merlot, procedente de un viñedo de bajísimo rendimiento, que por hectárea rendiría en promedio 2.600 litros. Pero que en la zafra 2018 rindió solo 558 botellas, vinificadas con los máximos cuidados por el Dr. Eduardo Boido y su equipo. Color rojo rubí intenso, perfume de frutas sanas y maduras, especias, hojas secas, y sutil vainilla. En boca es un tinto jugoso, amable al paladar (sus taninos están sumamente pulidos) y de muy agradable desarrollo en el paladar. Acidez equilibrada y final medio. Su crianza fue de seis meses en un mix de barricas de roble americano y de Europa oriental. Beber a 16 grados. Muy bueno con pizza cuatro quesos cocinada a la parrilla.
Bouza Viñedo Canelón Chico Tannat 2018 (Alc. 16,0 vol. / botella número 51 de 4.402)
Si alguien tuviera dudas sobre si el Tannat es una variedad noble muy bien adaptada a los diferentes terruños uruguayos, le diremos que existen tantos Tannat´s como bodegas en el Uruguay, pero que en todo el territorio nacional la Tannat es una uva que consigue expresarse de maravillas. Como en este caso, con un vino de coloración roja muy oscura (casi negra) que se puede observar con la sola acción de quitarle el corcho de la botella. En la copa, una vez aireado, su perfume seduce con frutas rojas y negras en compota y mermelada, especias finas y notas tostadas procedentes de su crianza en roble, que en este caso excedió el año. Boca contundente, donde la cepa en cuestión muestra toda su potencia (no así su tanicidad) y que al llevarlo a la mesa pide a gritos una carne con determinada gordura, como por ejemplo un bife Wagyu cocinado en su punto sobre fuego de leña de monte. Beber a no más de 15 - 16 grados.
Bouza Parcela Única Tannat B28 2018 (Alc. 16,0 vol. / botella número 43 de 5.303)
Fue el último de los tres probados, y la verdad que estuvo muy correcto haberlo dejado para el final. Es sin dudas (entre estos tres tintos) el más complejo. Mucha fruta pero también mucho buen aporte de la crianza - tanto en barrica, como el tiempo de afinamiento en botella - que le vino de perilla para que este gran tinto Tannat exprese todo lo mejor de la variedad. Potencia y elegancia se dan la mano en un vino de coloración roja muy oscura, con reflejos de juventud, y que mezcla el perfume de las frutas bien maduras y lo empireumático aportado por las barricas de roble francés donde reposó durante 15 meses. Viñedo plantado hace nueve años en Las Violetas, con una gran aptitud para la elaboración de vinos premium - como en este caso - que presentan boca carnosa, taninos presentes y pulidos, y gran potencial para la guarda. Beber a no más de 15 - 16 grados, acompañando costillas de cordero ahumadas en larga cocción, bañadas con salsa de mostaza, miel y soja.
Mayor información sobre Bodega Bouza en www.bodegabouza.com
Texto y fotos: Sommelier Daniel Arraspide