Vinícola Campos de Cima en Itaqui

Estuvimos de viaje por el extremo Norte de la Campanha Gaúcha, donde la región – bañada por las aguas del Río Uruguay – hace frontera con Argentina. Allí, donde la producción agropecuaria es fuerte, las tierras se reparten entre el cultivo de granos y la cría de ganado, está surgiendo una nueva actividad: la vitivinicultura, generando a la vez enoturismo, y atrayendo a quienes buscan vivir nuevas experiencias.

Localizada en el municipio de Itaqui (Rio Grande do Sul) la Vinícola Campos de Cima – propiedad de José Ayub y Hortência Ravache) comenzó sus actividades cuando en el año 2002 implantaron sus viñedos en una hacienda perteneciente a la familia, y diez años más tarde iniciaron la construcción de la moderna vinícola que a un lado de la rodovía 472 se encuentra a solo metros del principal acceso a la ciudad de Itaqui.

Con una importante producción de etiquetas que se reparten entre blancos, rosados, y tintos; desde tranquilos a espumosos, e inclusive licoroso (además de un Brandy) la empresa familiar ofrece diversos estilos que van desde vinos jóvenes hasta los de gran guarda, varios de ellos con el sello de la IP Campanha Gaúcha, garantizando el origen y las particularidades de esta Indicación de Procedencia.

Entre los rótulos que degustamos junto a Breno de Souza (enólogo de la casa) y a Pedro Candelaria (director comercial) nos sorprendió gratamente el Assinatura Chardonnay 2023 que presenta un bello equilibrio entre fruta y madera, con buen volumen, untuosidad, recordando a las frutas tropicales y de una muy buena complejidad que persiste en el paladar. Vino que recomendamos harmonizar con un risotto de camarones o un pescado con cierto tenor graso como el salmón grillado acompañado de vegetales.

Para los amantes de los tintos corpulentos y complejos no puede pasar desapercibido el Assinatura Blend 2022, un trivarietal compuesto por Tannat, Shiraz, y Malbec, con gran concentración de color, muy aromático (las frutas rojas y negras silvestres dominan en la nariz) que en boca presenta un paladar carnoso y aterciopelado donde los taninos bien redondos le otorgan una textura rica, elegancia y persistencia de paladar. Tinto ideal para acompañar con carnes rojas bien condimentadas y cocinadas en larga cocción como por ejemplo un goulash.

La degustación más completa entre las opciones ofrecidas – que puede incluir espumantes y vinos – es acompañada por una excelente selección de quesos regionales de pequeños productores, jamón serrano y panes artesanales. En todos los casos, previo a la degustación se realiza un tour guiado por las instalaciones de la vinícola, desde el área de recepción de las uvas, pasando por el sector de producción, y culminando en la sala de barricas.

Pero la experiencia en Campos de Cima no termina con la degustación. A solo metros de la bella recepción enoturística, la propiedad ofrece la posibilidad de hospedarse en su Wine House, una cómoda casa que acomoda hasta cuatro personas en dos dormitorios, y que suma todos los ambientes necesarios para una estadía confortable.

Vale la pena hacerse tiempo y aprovechar para dar un tour por la propia ciudad de Itaqui, donde se puede visitar el puerto de donde parte la balsa que conecta con la vecina ciudad de Alvear (al otro lado del Río Uruguay, en Argentina) lugar donde los atardeceres se pueden apreciar en toda su plenitud. Ya en la parte central de la ciudad, el Teatro Prezewodowski es un testimonio vivo que nos da testimonio de parte de la historia y la rica cultura de la ciudad.

Mayor información en www.camposdecima.com.br

Texto: Sommelier Daniel Arraspide

Fotos: Andrea Fontes y D. Arraspide